- Actualmente, el 75% de los emprendimientos fracasan en los 2 primeros años de operaciones, debido a factores como el financiamiento, la administración y retos de adopción digital, según revelan datos de QuickBooks y el IMCO.
- Por ello, las soluciones y herramientas en la nube se posicionan como la respuesta que las mipymes del país seguirán adoptando ante los nuevos escenarios pospandemia.
Ciudad de México, 23 de abril de 2022.- “Digitalizo, luego existo”. Quizá para la mayoría de los emprendedores del país este mantra ya forme parte de su ADN, sobre todo después de la pandemia, la cual dio un empujón a la transformación digital; sin embargo, para muchos emprendimientos esto aún representa una de las principales metas para optimizar sus modelos de negocio de cara a unas de las realidades del sector: la barrera de los primeros años.
Y es que de acuerdo con datos oficiales referidos por Deloitte, el 75% de las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) de México no sobrevive a los 12 meses de operar. En general, algunos de los retos que enfrentan son los costos y tramitología para su formalización y salud tributaria, financiamiento, administración, falta de educación, así como conocimiento sobre el mercado, según revela el reporte “De la informalidad a la competitividad. Políticas públicas para un ecosistema donde las pymes crezcan y se desarrollen”, de QuickBooks y el IMCO.
“En este contexto es que las mipymes encuentran en la transformación digital una de las mejores armas no sólo para afrontar este desafío de sobrevivencia, sino para evolucionar al siguiente nivel; de hecho, durante la emergencia sanitaria la mayoría viró hacia la adopción de soluciones tecnológicas para mantener sus operaciones. Ahora, lo importante es mantener esa tendencia al tiempo que las mipymes que no lo han hecho se sumen de una manera estratégica”, explica Ana Zaldivar, Directora de Producto de QuickBooks México, la plataforma de administración en la nube que ayuda a las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) del país a automatizar sus finanzas en una sola herramienta.
Con esto en mente, la experta comparte 3 áreas clave para digitalizar un emprendimiento en su primeros dos años de vida:
1.- Las ventas: el escaparate digital
Las ventas digitales fueron uno de los nichos de mayor crecimiento durante la pandemia, no obstante sólo el 20% de ellas tenía un ecommerce, por lo que para la mayoría el comercio online representó un nuevo frente. Ahora el 60% lo hace, de acuerdo con el “Estudio sobre Venta Online en PyMEs 2021”, de la AMVO. Desde luego, esto se traduce en una serie de necesidades para los nuevos emprendedores o bien para aquellos que comienzan a hacerlo.
Entre las principales se encuentra la llamada “integración puertas adentro”, es decir, una ejecución en la que todos los departamentos estén alineados con respecto a las ventas online, desde el control del stock, hasta las vías de pago, pasando por la logística, información de productos (imágenes, descripciones, etc.) en la tienda digital o marketplace, con el objetivo de mejorar la experiencia de cliente. En este proceso, soportes tecnológicos o softwares de administración permiten a las mipymes la integración de toda la información, funcionando como un asistente virtual que garantizan tener el control y registro de todos los movimientos.
2.- Administración inteligente
Derivado de lo anterior, la administración financiera es uno de los pilares más importantes para cualquier mipyme. De hecho, el correcto o desfavorable manejo del área contable es capaz de marcar el éxito o el fracaso. Aquí, las herramientas digitales basadas en la nube hacen que los procesos administrativos sean mucho más sencillos y más económicos de llevar, ya que cuentan con una gama de aplicaciones, desde una facturación en línea eficaz hasta la ejecución de tareas de forma automática.
En concreto, la tecnología enfocada en la digitalización de las finanzas permite hoy a las mipymes emitir facturas, dar seguimiento inmediato a sus ingresos y egresos, obtener reportes actualizados y realizar conciliaciones bancarias; todo ello ahorra tiempo, eliminando hasta 15 horas mensuales que se tenían destinadas para tareas administrativas como la conciliación y el rastreo de facturas en modelos de administración tradicionales.
3.- Las megatendencias: la data futura
Vivimos una revolución tecnológica también llamada “La cuarta revolución industrial”, donde una visión a futuro debe contar con un área clave: el big data. Actualmente, la mayoría de las decisiones de las empresas del mundo se toman con base en los datos que obtienen a través de redes sociales, correos electrónicos, formularios, contenidos, etc. Los usuarios cada vez son más conscientes de que, al entrar a estas plataformas digitales, autorizan el uso de su información, lo cual permite a las empresas conocer más de cerca lo que sus clientes desean.
Por eso es que el big data y la solución correcta (un ERP, por ejemplo) pueden facilitar la vida de una mipyme. Con ello, los emprendedores pueden acceder en tiempo real a toda la información que su negocio genera desde la administración, reportes, incidencias, usuarios… todo con transparencia, seguridad y confidencialidad. Con esta data automatizada, las mipymes pueden mejorar su incidencia en el sector, su atención al usuario y su crecimiento.
“Por un lado podemos ver cómo las mipymes constituyen una las principales fuentes de empleo y juegan un rol estratégico en el desempeño económico de cualquier región; por otro lado y en concordancia con lo anterior, el alentar su creación, evolución y desarrollo competitivo e innovador no sólo las beneficia a ellas, sino a todo el país, donde la tecnología funge como un catalizador que está cambiando el juego en favor de ellas y de todos”, concluye Ana Zaldivar.
