Una startup es un ecosistema empresarial que incorpora tecnología y un modelo de negocio escalable, además de un crecimiento acelerado y dinámico. Lo anterior, permite que sus procesos ocurran en un tiempo considerablemente menor en comparación con las grandes empresas, los que muchas veces toman años en establecerse.
En este contexto, es clave que una startup cuente con un equipo que logre responder adecuadamente a este rápido desarrollo, y que tenga ciertas habilidades de trabajo, donde la agilidad y la resiliencia, pasan a ser de gran importancia para lograr avanzar de la mano con estos veloces cambios, permitiendo con ello, su crecimiento y posicionamiento en el mercado.
Según estudios de desarrollo organizacional y personas, las diez primeras contrataciones de una startup definen su cultura, y la relación entre ésta y el reclutamiento de personal es totalmente directa, y esa cultura debe ser escalable y participativa ¿Cómo se puede lograr? Primero, se debe diseñar un modelo que funcione tanto para 10, 50, 100 o más personas. Lo segundo, entender que esta cultura no la definimos, sino que la co-construimos.
La cultura escalable pasa a ser un pilar fundamental para el desarrollo de una startup. Para lograrlo, se debe identificar cuáles son los valores colectivos y el propósito común que vincule y motive a las personas con su trabajo, y con ello, sienta la satisfacción de estar aportando a un sentido compartido. Estos valores se deben traducir en comportamientos, y no quedar en una declaración. Los líderes deben involucrarse y comprometerse con esa cultura, y demostrar su relato con acciones. Asimismo, entregar feedback y reconocimiento, para mantener cercanía y confianza con los colaboradores.
Así, la cultura organizacional escalable y colaborativa se debe transformar en el pilar de crecimiento de una startup para co-construir una identidad sólida y única, y con ello, conectar, a través de la tecnología, una solución con su público.
En nuestro caso, hemos logrado conectar la salud con los pacientes de latinoamérica a través de la automatización de procesos. Todo bajo un propósito compartido. Desde nuestros inicios, las personas han sido parte de la estrategia de crecimiento, participando en la definición de la cultura y de los procesos. Con ello, hemos logrado construir una cultura sólida con un retorno positivo en la organización, con un equipo conformado hoy por 70 personas, todas enfocadas en lograr mejorar el modelo de atención de los pacientes de centros médicos tanto públicos, como privados en todo Latinoamérica.
La constancia y coherencia han sido elementos fundamentales en todos los procesos de personas y cultura, y han estado alineados tanto a nuestro propósito -dar acceso a la salud por medio de la tecnología-, como a nuestros pilares culturales: el trabajo colaborativo, pasión por el cliente, foco en la excelencia y liderazgo transformacional.