¿Interés o compromiso? Aunque son términos que suelen usarse como sinónimos, y pueden confundirse, en realidad son bastante diferentes.
Sí, los dos tienen una gran influencia en nuestras vidas y en nuestras decisiones, y entender sus diferencias nos va a servir de gran ayuda para mantenernos enfocados en nuestros objetivos y en nuestras acciones.
Cuando mostramos interés por alguien o por algo, significa que despierta nuestra curiosidad o atención. Podemos estar interesados en una persona, en un trabajo, en una causa, en una actividad,…
Pero el interés lleva aparejada la temporalidad. Puede ser algo que nos atrae o nos interesa al momento, pero que no necesariamente se mantendrá en el tiempo. Sí, estás dispuesto a prestar atención y a seguir de cerca todo lo que sucede sobre ese objeto de interés, pero no a largo plazo… El interés se desvanece con el tiempo si no se sigue con la acción adecuada
Se puede entender también el interés también como una actitud pasiva, que se relaciona con la superficialidad e incluso, la falsedad. Por ejemplo, alguien puede mostrar interés en una persona por simple atracción física, pero no hay ningún compromiso de amor por medio
El interés, por lo general, no se asocia con una motivación significativa, mientras que el compromiso suele ser mucho más motivador. Esta diferencia es importante ya que nos muestra que el interés es una herramienta útil para motivarnos y prepararnos para el compromiso, y que es un paso necesario para llevar nuestros planes a la práctica.
Y es que el interés es el primer paso para llegar al compromiso, que es la clave para alcanzar tus objetivos. Uno puede sentir interés por algo, pero para alcanzar el éxito, uno debe comprometerse con sus objetivos
Por contra, el compromiso implica una actitud activa, y se suele asociar con ser más duradero que el interés, es más una dedicación a largo plazo. Esto significa que estás dispuesto a asumir responsabilidades y pactos más fuertes hacia algo o alguien que se mantendrán en el tiempo, Aunque puede ser difícil, especialmente cuando hay muchas tentaciones para abandonar…
El compromiso es más motivador que el interés. El compromiso ‘nos compromete’ a llevar nuestros objetivos a la práctica, y nos ayuda a mantenernos enfocados en ellos.
Y lo más importante, no hay que olvidar que el compromiso es un trato, acuerdo, pacto o como lo quieras llamar, que haces contigo mismo o con otro, que implica un bienestar para ti y para los demás. Como si hubiera una dedicación de amor y afecto por tu parte para lograr un objetivo, ya sea tuyo individual o con alguien.
¿Cómo entenderías el interés y el compromiso cuando quieres hacer deporte, adelgazar, aprender un idioma, mejorar tus competencias y habilidades en un área determinada, entre otras cosas? El interés sin compromiso no llega a nada. No creas que sólo por tener interés en algo lo vas a conseguir. No deberías engañarte.