La forma de trabajar está cambiando a un ritmo de vértigo. De las antiguas oficinas a las
actuales, parece que han pasado siglos, pero en realidad, tan solo ha sido un tránsito en la
nueva forma de entender la flexibilidad laboral, el teletrabajo y las nuevas directrices que
rigen las empresas de siempre.
Atrás quedaron los espacios totalmente divididos, con trabajadores compartimentados
haciendo labores individuales.
“Desde hace unos años, las reformas giran en torno a encontrar espacios abiertos. Es cierto
que se siguen manteniendo, porque son necesarias, salas de reuniones o en las que
realizar videoconferencias que estén algo más aisladas, no solo física sino acústicamente,
pero por lo general, al ser el trabajo más colaborativo, se busca que sea diáfano, claro y con una apuesta clara por la mejor iluminación” explican desde Tomás Monsalve,
especializados en la reforma de oficinas en Madrid, hub principal a nivel nacional de las
nuevas start ups y viveros de empresas.
Cuatro claves para acertar
Una entrada llamativa: la entrada a una oficina es la carta de presentación. De ahí que sea
necesario ser originales. Según los estudios, la mayoría de personas define una empresa a
raíz de la primera impresión que hayan tenido al acercarse a su sede.
Un diseño de iluminación es clave para conseguir bienestar dentro de las oficinas. La
mayoría del tiempo del día se pasa en espacios cerrados, de ahí que la intensidad lumínica
que se exige pero, sobre todo, es necesario apostar por espacios con bastante luz natural
para aprovechar el bienestar que produce.
Ventilación. Desde la pandemia se ha impuesto la necesidad de incorporar la ventilación y
filtros a las oficinas para garantizar la salud y apostar por un aire que garantice y evite
contagios, por ejemplo, de patologías como la gripe.
Plantear espacios de ocio para cuando los trabajadores necesiten un descanso. Cocinas,
salas de yoga, zonas de juegos…todo vale dentro de las organizaciones. Solo se trata de
dar con las necesidades de cada sector y cumplir los objetivos para que, quienes acuden a
trabajar al centro, dispongan de las herramientas para optimizar al máximo su talento,
recursos y tiempo.