A medida que las empresas adoptan las nuevas tecnologías en sus rutinas diarias, se busca a la vez impulsar el crecimiento y la eficiencia. Sin embargo, se ha demostrado que, pese a los avances que conllevan, es necesario también garantizar que los sistemas están protegidos de filtraciones de datos y amenazas cibernéticas.
“Las filtraciones de datos y las amenazas online se han convertido en riesgos importantes para empresas de todos los tamaños, que pueden ser víctimas de ataques maliciosos. Orientar a las empresas en la necesidad de cumplir con la legalidad de la Ley de Protección de Datos, evitar sanciones y garantizar el tratamiento de los datos con los que trabajan es clave para ayudarles a crecer” explican desde Vitaprogram, empresa especializada en este tipo de asesoría empresarial.
Pero no es el único eje sobre el que pende el crecimiento y desarrollo económico.
Los dos ejes básicos de la retención de talento que proponen desde la asesoría
Hay otros dos factores que pueden ser claves y cruciales para apoyar las políticas de expansión y crecimiento corporativo y pasan por el cuidado del personal.
Tanto la formación de empleados como la prevención de riesgos laborales cumplen con un objetivo común: hacer que el personal se implique en el funcionamiento corporativo gracias a su posible crecimiento laboral y profesional en el seno de una organización.
Independientemente del tamaño de la empresa, formar al personal no sólo en la política implementada de protección de datos sino también en cursos que mejores sus capacidades y conocimientos técnicos es importante.
“La mayoría de trabajadores que reciben formación por parte de la empresa lo hacen de una forma más que positiva. Se sienten valorados y entienden que esos cursos van a servir para mejorar los procesos que realizan, para ampliar sus conocimientos y crecer profesionalmente o bien porque sean campos que ellos consideran que podrían mejorar su trabajo diario. Se ha demostrado que esto implica al empleado en la empresa y acaba siendo su mejor baza para evitar la pérdida de talento” explican.
La prevención de riesgos laborales, al identificar los peligros y riesgos laborales en el lugar de trabajo, permite la implementación de medidas proactivas para garantizar la seguridad de sus empleados.
Por ejemplo, realizar evaluaciones de riesgos periódicas e implementar protocolos y procedimientos de seguridad puede ayudar a prevenir accidentes y lesiones.
Cuando alguien, en su puesto de trabajo, tiene la certeza de este tipo de acciones y su claro desarrollo va a permitir minimizar los riesgos en sus desempeños diarios puede mejorar su rendimiento.
“Atrás quedó el que los trabajadores fueran meros números. Hay que cuidarles e implicarles en las empresas. Para ello es necesario apostar por ellos, por su formación, por su seguridad y por las herramientas que les permitan crecer en lo personal y profesional. Cada vez son más las empresas que buscan retener talento y todo pasa por saber cuidar a su personal desde sus necesidades propias” concluyen.
Con esos tres ejes, tal como explican desde la asesoría, el camino hacia el éxito está mucho más dirigido.